Me dirijo a todos para comunicaros una decisión que ha sido difícil, pero que no tiene marcha atrás. Por una serie de motivos, entre los que está la actual coyuntura económica, tengo que abandonar la actividad profesional en el campo del cine, después de treinta años de dedicación y entrega casi exclusiva, a lo que yo considero una forma de vida y una pasión.
En mi despedida, quiero agradecer, de corazón, todo el apoyo y las muestras de cariño que he recibido en estos años. Para mí, los clientes, amigos, empresarios, periodistas, políticos etc. me han ayudado mucho, y me han posibilitado disfrutar de una etapa de mi vida que sólo puedo considerar como maravillosa. Es cierto que he tenido épocas de incertidumbre y las he superado por las ganas de trabajar, la imaginación, la ilusión y el respaldo de muchos a los que, con el tiempo, he llegado a considerar amigos.
Como ocurre en Cinema Paradiso, película que refleja mi vida y mi relación con el mundo del séptimo arte, hay que saber adaptarse a los nuevos tiempos y a las nuevas necesidades, y en eso estamos…
Desde el pasado mes de mayo, Alucine tiene otros gestores, “el Grupo Selma”, y ojalá, de todo corazón mejoren mis resultados. Espero y deseo que sean capaces de mantener la satisfacción y exigencia que siempre tiene el público al acudir a unas salas, que, aunque modestas, si que tienen el valor añadido de la colaboración de un pueblo y una comarca.
Como conclusión diré que, desde los 13 años, el cine lo es todo para mí, pero ahora mi camino profesional irá encaminado al mundo de la agricultura.
Muchas gracias a todos.
José Ramón Gascó
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